Guatemala | January 29, 2020
La palabra aduana posee una variedad de etimologías, una de ellas es del árabe “Al Diovan” casa o lugar donde se reunían los administradores de finanzas para la percepción de derechos o impuestos, otra es del italiano “Dogona” o del persa “diván”, lugar o local de reunión de los administradores financieros.
La aduana es una institución antiquísima, aunque su organización con arreglos a los sistemas en uso, data de los últimos siglos, primariamente predominó el régimen fiscal de las aduanas, siendo después utilizadas estas para defender y proteger las industrias, sin perder por eso, su carácter principal de fuente de recursos financieros para los Estados.
El más antiguo antecedente de la aduana, constituye el portorio de los romanos; los fenicios fueron los que iniciaron el registro para el comercio de importación y exportación, quienes a su vez fueron seguidos por los cartaginenses, que fueron grandes comerciantes en el Mar Mediterráneo, también existieron las aduanas de Grecia en la época antigua y se cobraba un impuesto del 2% sobre mercancías que se importaban y exportaban, igualmente existieron aduanas en aquellas ciudades que tenían un gran auge comercial como: Génova, Pisa, Venecia entre otros.
Fueron los árabes quienes impulsaron el impuesto de aduana, dándole el carácter de contribución general sobre todos los productos que ingresaban por sus fronteras, ellos introdujeron las aduanas en España desde la dominación ocurrida en el siglo VII y llamaron Portazgo al derecho que pagaban las mercancías que se transportaban de un lugar a otro.
Para establecer y fomentar el comercio entre la metrópoli y sus posesiones americanas, se fundó en Sevilla, la casa de contratación, cuyo puerto era entonces el último habilitado para el comercio con las Indias, el tráfico comercial entre Europa y América solo podía realizarse en aquella época, en dos flotas que anualmente debían salir de los puertos habilitados de la península, primero fue el de Sevilla, después el de Cáliz y posteriormente los de otras provincias de España.
Las aduanas latinoamericanas concentran su historia en tres etapas:
1. Primera etapa: desde la independencia a la crisis de 1929, época en que los aranceles tiene relevancia como instrumentos financieros.
2. Segunda Etapa: periodo de 1930 a 1958-60, marginación de los instrumentos aduaneros con excepción de los países pequeños que mantuvieron los aranceles como objetivo financiero.
3. Tercera Etapa: 1958 a la fecha, surgen los procesos de integración de unidades aduaneras, implementando el arancel como instrumento de política económica y de la política aduanera en particular.
Para Guatemala y el resto de estados centroamericanos, la definición legal de aduana es la siguiente:
Artículo 6. Servicio aduanero
El Servicio Aduanero está constituido por los órganos de la administración pública de los Estados Parte, facultados para aplicar la normativa sobre la materia, comprobar su correcta aplicación, así como facilitar y controlar el comercio internacional en lo que le corresponde y recaudar los tributos a que esté sujeto el ingreso o la salida de mercancías, de acuerdo con los distintos regímenes que se establezcan. Al Servicio Aduanero le corresponde la generación de información oportuna, la fiscalización de la correcta determinación de los tributos, la prevención y represión cuando le corresponda de las infracciones aduaneras, sin perjuicio de las demás que establece este Código y su Reglamento. La organización territorial de los servicios aduaneros divide el territorio aduanero en zonas que se establecerán reglamentariamente.